Por lo general, es posible realizar un relleno de arrugas en cualquier área facial cuando la indicación es correcta, tanto por la zona a tratar como por el relleno de arrugas empleado. La áreas que se rellenan con más frecuencia son los surcos nasogenianos, el perfil labial, las arrugas perioculares y el entrecejo.
Existen tres grupos diferenciados de sustancias de relleno de arrugas: tejido propio, material reabsorbible y material definitivo. Cuando se emplea tejido del propio paciente para el relleno de arrugas, generalmente se trata de grasa obtenida del abdomen o de las caderas, procesada en quirófano e implantada como injerto. Las sustancias reabsorbibles suelen estar compuestas de colágeno y de ácido hialurónico. Por último, los materiales permanentes para el relleno de arrugas, con probada tolerancia por el organismo, son derivados de productos utilizados en otros campos de la medicina.
El resultado óptimo de relleno de arrugas se consigue cuando los deseos de la paciente se ajustan a los resultados finales.
En general, cuando se aplican tratamientos de relleno de arrugas en cantidad moderada y cuando el producto se ajusta al área anatómica que se está tratando, los resultados obtenidos son excelentes.
En su mayoría, los productos reabsorbibles empleados para el relleno de arrugas incluyen en su composición algún material que contiene de forma natural la dermis.
Por su parte, el colágeno y el ácido hialurónico son empleados con mucha frecuencia en este tipo de relleno de arrugas. En cuanto a los productos definitivos o no reabsorbibles, se utilizan compuestos químicos derivados de algún elemento que tiene aplicación en otro campo de la medicina y que ha demostrado una buena tolerancia por el organismo durante años.
Si el producto empleado para el relleno de arrugas tiene registro CE y si el médico que lo aplica cuenta con experiencia y formación, se puede decir que estos tratamientos son seguros. No obstante, como en todos los tratamientos médicos, pueden aparecer contraindicaciones. En este sentido, no deben emplearse, por ejemplo, en mujeres embarazadas ni en personas que presenten algún proceso infeccioso local en la zona a tratar o que tengan diagnosticadas enfermedades autoinmunes o del colágeno.
En el caso de los productos que contienen colágeno, es del todo aconsejable realizar una prueba de alergia previamente al relleno de arrugas. En el resto de tratamientos no es necesario, aunque se aconseja ser prudente en la primera intervención y no intentar alcanzar el resultado definitivo esperado, pudiéndose realizar un nuevo relleno de arrugas durante las dos o tres semanas posteriores, con el objeto de comprobar el comportamiento que ha tenido dicho producto en la persona.
Productos reabsorbibles para el relleno de arrugas.
Cuando se utilizan productos reabsorbibles para el relleno de arrugas, habrán de realizarse sesiones de relleno de arrugas cada seis, ocho o doce meses, en función del producto utilizado, de la cantidad infiltrada y de las características propias del paciente, no es aconsejable alcanzar el resultado esperado en una primera sesión. Resulta recomendable mostrarse conservador en el primer tratamiento de relleno de arrugas, pues es posible realizar una posterior corrección a las dos o tres semanas, con el objeto de afinar y perfeccionar al máximo.
La mayoría de las sustancias de relleno de arrugas que se emplean en cirugía plástica para la corrección de depresiones o arrugas son administradas en forma de inyección a distintos niveles de profundidad, en función la zona anatómica que estamos tratando y la composición química del implante.
Procedimiento de relleno de arrugas.
En aproximadamente 30 minutos es posible conseguir una corrección de los surcos nasogenianos, un relleno labial o una eliminación de las patas de gallo.
Existen diferentes métodos para anestesiar la piel antes de proceder a la infiltración para el relleno de arrugas. En este sentido, se pueden administrar pomadas de anestesia local que, aplicadas dos o tres horas antes, consiguen anestesiar el área tratada. Otras veces, cuando trabajamos en la cara, se realiza un bloqueo nervioso a distancia mediante la inyección de anestesia local con una aguja muy fina. Después de la sesión, el efecto de la anestesia local para el relleno de arrugaspersiste durante algunas horas, proporcionando comodidad al paciente sin necesidad de administrarle medicamentos analgésicos.
Tras el relleno de arrugas es recomendable aplicar frío tópico en la zona tratada, en forma de bolsa con gel a baja temperatura. Durante las primeras 12 horas, la zona intervenida debe mantenerse limpia, sin cremas ni maquillajes. Salvo prescripción facultativa, no es recomendable masajear ni manipular el área donde se ha realizado el relleno de arrugas. Asimismo, el paciente deberá abstenerse de tomar el sol, antiinflamatorios y ácido acetilsalicílico durante los cuatro o cinco días posteriores a la infiltración. Por lo demás, el intervenido deberá llevar a cabo una vida completamente normal.
El área donde se ha producido el relleno de arrugas se mostrará ligeramente inflamada por efecto de la inyección, lo cual proporciona un aspecto de mayor corrección que el realmente obtenido. Por lo demás, la apariencia de la piel será normal y no presentará hematomas ni otras lesiones que pudieran ser motivo de preocupación para el paciente.
Indudablemente, el personal médico cualificado para realizar el relleno de arrugas y en las condiciones de asepsia idóneas. Reconocida por el Ministerio de Educación y Ciencia, la cirugía plástica y estética es, hoy en día, la única especialidad que garantiza una formación con rotaciones específicas en todas las técnicas que tienen relación con la cirugía y la medicina estética.