¿Qué es el peeling químico? | Definición
El peeling químico es un tratamiento que consiste en la aplicación de un agente químico en la piel que acelere el proceso normal de exfoliación de la misma, produciendo una posterior regeneración y mejoría de su apariencia de una forma segura y eficaz. Es un método para conseguir un rejuvenecimiento facial.
Peeling químico: superficial, medio y profundo
Dependiendo del nivel de la piel en el que actúen, podemos hablar de peeling químico superficial, medio y profundo. Su efecto de destrucción y posterior regeneración cutánea dependerá de esta capacidad de penetración, y abarcará, desde la corrección de las arrugas finas y pigmentaciones superficiales, hasta la mejora y aplanamiento de las arrugas más marcadas, la regeneración de la piel dañada por la exposición solar y la eliminación de queratosis seborréicas, cicatrices de acné, lesiones pigmentadas, melasma, telangiectasias, etcétera.
Se emplean diversos productos en un peeling químico:
Alfa-hidroxiácidos (ácido glicólico, ácido cítrico, ácido láctico…), ácido salicílico, retinoides, ácido tricloroacético, fenol, etcétera, presentados de forma aislada o combinados entre sí y en distintas concentraciones. Cada uno de ellos está dirigido a producir una exfoliación a un nivel distinto de la piel.
¿En qué casos es eficaz el peeling químico?
En el tratamiento de pacientes con alteraciones del aspecto o de la calidad de la piel, que no sean candidatos a cirugía y que tengan unas expectativas realistas, el peeling químico es una opción eficaz.
Entre las principales expectativas de un peeling químico, se incluyen el deseo de:
- Mejorar la apariencia de la piel dañada o envejecida por la exposición solar repetida.
- Destruir lesiones epidérmicas como léntigos o queratosis actínicas.
- Alisar arrugas poco profundas.
- Aplanar cicatrices moderadas.
- Mejorar las alteraciones cutáneas como el acné.
- Eliminar discromías y pigmentaciones.
Asimismo, el peeling químico puede realizarse de forma combinada con otros métodos de rejuvenecimiento facial.
Si desea más información científica puede visitar este artículo de la Wikipedia sobre el peeling químico o puede continuar leyendo nuestro post.
¿Qué debe esperarse después del tratamiento?
Tras la exfoliación de la epidermis y la destrucción parcial de la dermis producidas por un peeling químico, se inicia un fenómeno de regeneración de la epidermis; un engrosamiento de la dermis, con un aumento del colágeno y las fibras elásticas, y una disminución de las células que producen la melanina. Todo esto se traduce en un aspecto más saludable de la piel, que aumenta su tersura y elasticidad, disminuye los signos del envejecimiento, las manchas, las arrugas finas y las pequeñas irregularidades y cicatrices.
¿Con el peeling se eliminan definitivamente todas las manchas?
Pese a que se consigue una gran mejoría a este respecto, no es posible garantizar que no puedan surgir de nuevo. Los peelings químicos, dependiendo de su nivel de actuación, pueden producir la eliminación de algunas pigmentaciones, al exfoliar la piel pigmentada y producir una disminución en el número de células que producen melanina. Posteriormente a esta intervención es fundamental el uso de tratamientos despigmentantes y evitar la exposición solar, con el objeto de reducir la aparición de nuevas manchas.
¿Hay que preparar la piel antes de cualquier peeling?
Sí, antes de la realización de un peeling debe realizarse un tratamiento de la piel (en especial en los peelings medios y profundos), generalmente con el mismo tipo de sustancias que se usarán en el peeling, en concentraciones más bajas y asociadas a sustancias despigmentantes, con el fin de mejorar la posterior penetración del producto y reducir sus efectos secundarios.
En algunos casos también es conveniente un tratamiento posterior de mantenimiento realizado en el domicilio.
¿Cómo se realizan los peelings?
En primer lugar, antes del peeling químico hay que proceder a una limpieza de la piel para eliminar los restos de maquillaje y grasa.
A continuación, procedemos al peeling químico. Se aplica el agente químico (generalmente un líquido o un gel) sobre la superficie cutánea a tratar, dejándolo actuar durante unos minutos (tiempo variable según el tipo de peeling químico y la zona a tratar) y eliminándolo posteriormente con agua o neutralizándolo con bicarbonato.
Por último, para finalizar el peeling químico se aplica alguna mascarilla o tónico con agentes calmantes.
En algunas ocasiones se pueden realizar sesiones repetidas de peeling químico para obtener el efecto deseado.
¿Hay que tomar precauciones?
Antes de proceder al peeling químico es preciso realizar un examen físico del paciente y de su tipo de piel, con tratamiento preventivo si ha existido alguna vez una infección por herpes simple. Debe evitarse esta técnica en pacientes sometidos a tratamiento con tretinoína, en caso de que la piel haya sido tratada con radioterapia, en personas con cicatrización patológica, psoriasis rosácea o dermatitis atópica, y en embarazadas. Después del peeling químico, debemos evitar las saunas, los baños turcos y el ejercicio intenso durante la semana posterior al tratamiento, protegernos del sol con pantallas solares de índice de protección alto, disminuir o evitar el consumo de tabaco mientras se produce la regeneración de la piel, y aplicarnos cremas hidratantes con frecuencia.
¿Puede sustituir el peeling al láser para el rejuvenecimiento cutáneo?
El peeling químico más profundo produce en la piel un efecto semejante al rejuvenecimiento cutáneo que se consigue con el láser, ya que en ambos casos se consigue una destrucción de la piel envejecida y una posterior regeneración de la misma. En algunas ocasiones también se puede emplear el peeling químico como tratamiento combinado en el mismo paciente.
¿Cuáles son las limitaciones de los peelings químicos?
Aquellos casos de envejecimiento cutáneo que asocian descolgamiento del tejido facial, exceso de piel o bolsas perioculares, etcétera, requerirán recurrir a la cirugía (blefaroplastia: eliminación de la piel palpebral sobrante y de las bolsas perioculares, lifting, es decir, recolocación del tejido facial descolgado y eliminación del exceso de piel…) para obtener un resultado satisfactorio. En estos casos, el peeling químico puede asociarse al procedimiento quirúrgico, con el objeto de mejorar el aspecto de la piel. El peeling químico tampoco será efectivo ante cicatrices hundidas y muy marcadas, y arrugas de expresión profundas, que mejorarán más con otros procedimientos, como la inyección de toxina botulínica y/o la utilización de sustancias de relleno.
¿Cuáles son las complicaciones posibles?
Entre las complicaciones de un peeling químico (infrecuentes, aunque más habituales a mayor profundidad del peeling químico) se encuentran:
- Infección de la piel por bacterias o virus.
- Infección por herpes simple.
- Retraso en la curación y enrojecimiento persistente durante más de tres meses.
- Cicatrices hipertróficas y queloides.
- Hiperpigmentaciones o hipopigmentaciones.
Todas estas complicaciones disminuyen si el peeling químico es realizado por profesionales experimentados, y si los problemas son detectados y tratados de forma precoz.